12/10/11

ESTE JUEVES UN RELATO: VOCES



Su cabeza golpeaba monótonamente contra la pared acolchada de la habitación.

Repetía sin descanso una letanía ininteligible, como un chacra necesario para ahuyentar los malos espíritus.

Vestido de blanco y con la camisa de fuerza, parecía desvalido e indefenso, pero para todos los que trabajábamos allí, verlo a través de la ventanilla blindada, despertaba un miedo morboso; como cuando ves a solas en casa una película de miedo y a pesar de tu terror no puedes dejar de verla.

Era un caso curioso. Cuando vino la primera vez, se le veía asustado, lloroso, no entendía el porqué de su internamiento. ¿Por qué estaba él allí? Él no había hecho nada, nada en absoluto.

No se cansaba de decir que él sólo fue el brazo ejecutor de una orden superior.

Cuando la policía llegó a su casa, se encontró con una escena dantesca. El cuerpo del anciano permanecía inmóvil en el sillón con una mueca de espanto en su rostro. La sangre manaba a borbotones de su garganta derramándose por el suelo, formando un charco espeso y negro. Tenía los ojos abiertos, como no pudiendo creer lo que estaba enfrente suyo.

 Frente a él estaba su ejecutor, inmóvil, con las zapatillas empapadas de sangre y un cuchillo de carnicero en su mano derecha. “Hacía ruido”, “hacía ruido”, “hacía ruido” repetía una y otra vez.

 He aquí su declaración ante el juez:

El cuchillo cayó al suelo, junto a mis pies. Estaba manchado de sangre.
Como mis manos.
Observé durante breves instantes el cuerpo que yacía a pocos metros de mí. Cerré los ojos al sobrecogerme ante la expresión de terror que el cadáver manifestaba. Me arrodillé y llevé las manos a mi cara, intentado ocultar mi profundo arrepentimiento. ¡Le había matado! Le clavé el cuchillo varias veces, hundiendo la hoja hasta su pequeña empuñadura. Le había destrozado por completo. Lo hice. Sí. Con rabia. Con desesperación.
No fui yo. Las voces me obligaron a ello. Esa es la verdad. La terrible verdad. Llevaba varios días oyéndolas dentro de mi cabeza. Al principio eran pequeños murmullos, palabras sueltas, pero pronto comprendí que aquellas voces me hablaban a mí. Sólo yo podía oírlas.
Me insultaban. Se burlaban de mí. Me amenazaban de muerte. Ellas me instigaron, me indujeron a cometer el atroz crimen.
¡¡No podía soportarlo!!
Sonaban en mi interior cada día, cada noche. Apenas me permitían dormir, no podía vivir. Resonaban en mi mente y estallaban como bombas que me angustiaban. Estaba atormentado. Desquiciado.
Ellas me propusieron acabar con la vida de mi vecino. Me indicaron el lugar, escogieron el día. Me dieron la fuerza. ¡¡No pude resistirme!!
Aquellas diabólicas voces me aseguraron que si hacia lo que me decían se marcharían, me abandonarían. Intenté resistirme pero la tortura a la que era sometida fue más poderosa. ¡Quería tranquilidad! ¡¡La necesitaba!!
Sólo había una forma de conseguirla y mientras las voces golpeaban mi cabeza con sus burlas, sus gritos, con sus amenazas y desprecios...lo hice. No lo dudé en ningún momento. ¡Le clavé el cuchillo! ¡Una vez! ¡Y otra! ¡Y otra más!
Intentó zafarse. Escapar del horror pero nada pudo hacer salvo agitarse vanamente. Cuando dejó de moverse, cuando encontró la muerte…las voces desaparecieron por completo. La tranquilidad, la calma, se adueñaron de mí… Ahora algo ha cambiado, algo ahora es distinto. Ahora…estoy tranquilo.
“Yo no soy así” dijo.

El juez en la sentencia dijo que el asesinato lo cometió en un momento de enajenación mental y no lo podía meter a la cárcel por ello. Así que lo enviaron aquí por un periodo mínimo de cinco años.

Ahora, me encargo yo de él. Le llevo la comida o le saco al jardín.

Le estoy viendo ahí sentado, golpeando su cabeza. Un hilillo de baba se le escapa por la comisura de sus labios; será consecuencia de los electrochoques o del pentotal.

Los demás enfermeros se ríen de él porque dicen que escucha voces. Pero yo no, yo no me río porque sé perfectamente de que me habla. Yo también escucho voces. Voces claras, muy claras y me dicen:
“Mátalo”, “mátalo"

13/9/11

Palabras en la arena


Algún día seré feliz. Seguro que sí. No es que ahora no lo sea, soy feliz a mi manera, pero ahora estoy hablando de "otra" felicidad.
De esa que siento cuando dibujo palabras en el aire y veo cómo se convierten en cometas y vuelan hasta donde las envío. Y llegan, que es lo importarte.

Durante el viaje se entretienen entre ellas, juegan y forman frases, unas veces dulces, curiosas o elegantes; algunas otras, el dibujo se deforma un poco y la frase parece algo triste....pero continúan el viaje. De vez en cuando, hasta se juntan unas frases con otras y forman una guirnalda que adorna el hermoso cuello de alguien querido...y se queda el tiempo suficiente como para que las palabras se fundan con el calor de esa suave piel. Y allí se quedan, viviendo para siempre.

Sé que, en algunas ocasiones, algunas se pierden; ése es un penoso y triste dolor, pero....es que, como ya dije al principio...."algún día seré feliz". Y eso ocurrirá cuando pueda recoger todas esas palabras perdidas....porque sé a dónde fueron a parar: al mar.

Y allí, en el mar, las encontraré a todas, reunidas en alguna playa solitaria y escondida; jugando con conchas y caracolas, dejándose acariciar por las olas mientras esperan mi llegada. Y yo llegaré, y me uniré a ellas en sus juegos; y formaremos otras nuevas palabras que escribiremos en la arena, muy cerca del agua para que las olas las vayan borrando mientras las escribimos.

Serán palabras que solamente podremos leer quienes hayamos llegado hasta ese punto....sin retorno. Ya sabéis...cuando yo sea total y auténticamente feliz...

7/9/11

:ESTE JUEVES UN RELATO:"RENE LAVAND. NO SE PUEDE HACER MÁS LENTO


Cuando con tus manos haces magia, se torna una locura y compartimos en la distancia el mismo sueño y las mismas ganas de morir abrazados en la tempestad de mi cama.

Se embriaga de lujuria mi habitación y soltamos las más terribles fantasías que envenenan mi cabeza con momentos perfectos y algo más.
Cuando haces magia con mi libertad y la conviertes en lo más productivo, logras mi ansiada felicidad y entonces es cuando yo puedo hacer magia y te llevo lejos, trayéndote de nuevo a la más triste realidad.
Es lo que hacen los magos y tú, tú haces magia con tus manos.
 Más magos y lentos en casa de Gus

2/9/11

MI FUEGO


Me despierto encendida, deseando algo que calme ese fuego que siento dentro,
pero luego al pensar en ti, me doy cuenta que lo que menos deseo es apagarlo....
Lo único que quiero es que me desgarres con tus caricias, encenderme más con tu fuego.
Humedecerme con tu sudor, y que me despiertes con tu pasión.
Que me marques con tus besos, que me hagas tu nido de amor.
No me dejes escapar, lo voy a intentar...
Atrápame con tus manos, y no dejes que me vaya.
Tu alberca será nuestro lecho, el cielo nos cubrirá,
Deseo estar abrazada a tu pecho mientras imaginas lo que mis manos harán.
Tu fuerza aumenta estas ganas, este fuego,
Nuestros cuerpos incendiándose, mis gemidos constantes,
nos llevan a perdernos por completo, todo se nubla un instante
Nuestras almas se poseen, nuestra pasión es incesante
Mi alma tiembla, mi cuerpo más,
tu furia es lo único que me calma.
Nuestro amor es salvaje, respiramos olor a mar, a tu mar.
Nuestra sangre es puro ardor, puro fuego,
nuestras mentes ya no piensan, solo importa este amor.
Mi fuego va en aumento cada día, solo lo puedes calmar TU.

25/8/11

Besos de chocolate



Llego a la casa, y con mis llaves abro la puerta principal,
dejo mis cosas en la mesa , voy al cuarto,
te veo dormir en la cama, tranquilo y sereno..
Me desvisto poco a poco y del espejo observo tu movimiento, queriendo disimular...
quito mi vestido desabrochando lentamente cada botón, -cae al suelo-
vuelvo a observar el espejo y te haces el dormido...
Entro al baño y abro la llave de la ducha, mientras se va calentando el agua,
quito mi ropa interior, y comienzo a bañarme,
observo una sombra detrás de la cortina de baño pero solo la ignoro..
uso la esponja y la froto por mi piel, y con el agua quito toda la espuma.
Voy a tomar la toalla para secarme, y la sombra se va muy rápido..
me dirijo de nuevo al cuarto y sigues "dormido" en la cama...
con una mano sostengo lo que me cubre, y con la otra busco que ponerme,
de repente bajo la guardia, mientras me observabas disimuladamente...
Te diriges hacia mi, tomas mis manos y separas mis brazos -la toalla cae al suelo-
dejándome como la primera vez que dormimos juntos aquella noche,
besas mi cuello lentamente, mientras mi mano acaricia tus mejillas...
me tomas de la cintura y me volteas, me besas, me haces sentir tuya...
el corazón se me acelera mientras más me besas, -tomas el chocolate derretido que había comprado-
lo untas por mi cuello, por mi espalda, por mis hombros... como si fuera crema para la piel...
lo quitas con tus labios mientras subes rozándolos suave y delicadamente,
me susurras al oído, vuelve a bañarte pero esta vez conmigo...

24/8/11

ESTE JUEVES UN RELATO: LOS CIEGOS TAMBIÉN ESCRIBEN


No recuerdo la última vez que vi la luz. No estoy diciendo una imagen, una casa, una flor o algo tan trivial como un coche. Estoy diciendo la luz. Ese resplandor que recibes cuando sales de un lugar oscuro o la claridad que notan los ojos cerrados en una siesta una tarde de verano.
¿Sabes? Los tengo siempre abiertos, mirando con la mente lo que no puedo percibir con mis ojos.
Yo escucho un sonido o un ruido e intento ponerle forma. El ladrido de un perro, el agua que gotea de un grifo mal cerrado, el susurro de una voz…
Es curioso, pero la pérdida de nuestro primer sentido, hace que los cuatro restantes, se multipliquen.


De repente, un día, notas que percibes el breve rumor de una mariposa, que las manos son capaces de distinguir mil texturas diferentes, que tu sentido del olfato es capaz de competir con el de un sumiller, que puedes descubrir los diferentes matices de un beso.
Nos llaman invidentes, pero quizás yo veo más que tú, porque veo lo que tú no ves y siento lo que tú no sientes.
Pero es verdad, no consigo recordar la última vez que vi la luz.
Quizás fue un amanecer o una puesta de sol. O quizás no fuese tan romántico y simplemente fue la luz de una bombilla balanceándose en el techo.
Pero hay algo en lo que tú y yo seguimos siendo iguales.
Yo también lloro. A pesar de mis ojos vacíos, más lágrimas también brotan saladas.
Tú quizás lloras por un amor que perdiste, o por un recuerdo olvidado o por cualquier cosa… y yo a veces lloro, porque simplemente no recuerdo la última vez que vi la luz.


Os dejo una pequeña aportación que ha querido hacer mi hija Débora. Espero que os guste...


  Luis era un niño que con 12 años tuvo una enfermedad y se quedó ciego. Sus padres estaban preocupados porque casi no tenía amigos y  cuando está en el colegio no tiene ningún amigo ese niño cumplió 17 años. Y empezó a recordar los bonitos paisajes sobre todo a sus padres  no recuerda cómo eran solo sabe k son unas personas muy queridas y muy alegres y a veces tristes y que ellos también tienen sentimientos como él.
 Se propuso una cita a ciegas pero resultó que la chica no era ciega y le podía  ver. Entonces se dijo así mismo… ¿cómo voy a tener novia si no veo? pero por si acaso se cogió unas gafas negras por si acaso no era ciega y le veía y se asustaba o no querría salir con el...
 A las 18:00 vino Luna la chica que le llamó y se fueron a tomar algo y le dijo k si se podía quitar las gafas para poder ver los ojos tan bonitos que tenía. Luís dijo a Luna que no quería porque si no, no saldría de novios con él. Entones le quitó las gafas cariñosamente y vio que era ciego y Luis dijo que él no podía salir corriendo de la pena que le daba no poder salir con ella porque igual ella no quería salir con él. Entonces Luna dijo a Luis que la daba igual que fuera ciego y que solo la gustaba lo buen chaval que era y Luis dijo a Luna que era muy amable por su parte pero que si no quería salir con el que no pasaba nada pero la chica le dijo que sí que quería salir con el entonces
....Pasaron 6 años y Luis ya no era ciego porque le habían operado. Luis vivía ya con su mujer Luna y con sus 2 gemelas Susana y Gabriela. Luis y Luna ya tenían 23 años y las pequeñas de la casa 1 día.
Luna y Luis  vivieron felices y comieron perdices.

Escrito por Débora. 11 años

Más ciegos en casa de Gus 



15/8/11

ESTE JUEVES UN RELATO: LO QUE ESCONDEN LAS PALABRAS

Te prometo que te usaré en pretérito imperfecto, con el verbo que prefieras, que no trascenderás al futuro perfecto, yo por mi parte me comportare como un pluscuamperfecto.
Si lo de conjugar verbos  nos aburre, siempre nos quedarán otras gramáticas.
Orales o no orales, si quieres podemos probar con sustantivos o añadirle algún adjetivo. Pero si en vez de tanta lengua eres más de lo espiritual, podemos buscar la sabana santa por mi cama.
Te prometo ser atea en tu religión, siempre que seas tu agnóstico en mis sueños.
No hace falta que prediques los diez mandamientos, que prometo no hacer caso de tus leyes y perder de vista las mías.
Te juro ser solo obediente al instinto, el que te hace ser adicto a mis caderas.
Y en la suma de los cuerpos, prometo buscar el verbo perfecto, que se esconde bajo el vientre.


Más palabras donde Juan Carlos

9/8/11

ESTE JUEVES UN RELATO: A LA PLAYA


Hace años, paseaba por la cala del Sardinero en Santander de la mano de la persona que más he amado jamás. Íbamos en silencio, pero no era un silencio incómodo porque ese silencio decía muchas, muchas cosas ya que esa iba a ser nuestra última noche juntos.
Nos conocíamos hacia años y aunque vivíamos en la misma ciudad, nuestras vidas eran incompatibles.
La primera vez que hicimos el amor fue en esa misma cala y como único testigo teníamos al cielo lleno de estrellas que iluminaban nuestros cuerpos desnudos. Desde esa noche, todos los años quedábamos ese mismo día para volver hacer el amor en el mismo sitio. Así llevábamos diez años.
Durante el resto del año, ni una llamada, ni un mensaje, ni un café y si por un casual nos cruzábamos por la calle, pasábamos de largo como dos completos desconocidos, sin tan siquiera mirarnos, pero ambos deseando que el tiempo pasara y llegara nuestra noche para amarnos sin medida.
Aprovechábamos al máximo nuestra noche, teníamos que hacerlo ya que en cuanto salía el sol, él desaparecía y solo quedaba de esa noche el recuerdo y un colgante plateado de una bruja sentada en la luna y a sus pies, una piedra rosa pendido de mi cuello. Era su manera de decirme que me esperaba a la misma hora y en el mismo sitio al año siguiente. Yo tenía que llevar puesto el colgante todo el año, y el día antes de nuestro encuentro, debía quitármelo y dejarlo en una consigna de correos. Ese era el trato. Dijimos que nunca nos diríamos adiós, que llegado el día en el que nuestra historia se acabara, uno de los dos no devolvería el colgante. Entonces, sólo entonces, sabríamos que esa sería nuestra última noche juntos.
Faltaban apenas veinticuatro horas para volver a verle. Estaba ansiosa. Hacía tanto que no sentía sus caricias… Y aunque el aroma de su piel estaba tatuado en mi piel, necesitaba volver a besarle fervientemente para volver a sentirme viva. Me dirigía a correos con mi colgante, con mi pasaporte a una noche más de amor eterno, cuando algo me detuvo. No puedo explicar muy bien qué fue. Sólo diré que no fui capaz de desprenderme de mi brujita rosa. Llevaba diez años en mi cuello colgada, solo me la quitaba veinticuatro horas, pero esta vez no pude desprenderme de ella porque cuando intente hacerlo empezó a faltarme el aire y es que mi colgante, mi brujita rosa, no era solo mi pasaporte hacia una noche inolvidable, era desde hacía años, parte de mí.
Esa noche, en esa cala del Sardinero, supe que nunca más le volvería a tocar, a sentir, a besar, a amar. Supe que nuestra historia de amor se había terminado y supe que jamás volvería a enamorarme. Pasamos la noche desnudos, bajo la luz de la luna más grande y más llena que jamás mis ojos habían visto, haciendo el amor desenfrenadamente, sin mediar palabra, pero sabiendo los dos que esa era nuestra última noche. Me quedé dormida casi al amanecer, entre sus brazos, con la luna y el mar, nuestro mar como únicos testigos tal y como venía haciendo los últimos diez años y, cuando desperté, supe que todo había acabado, que jamás mis labios rozarían los suyos nunca más. Me toqué el cuello y el colgante había desaparecido. Me levanté de golpe. Empezaba a faltarme el aire, necesitaba el colgante para poder seguir con mi vida, esa vida que yo odiaba pero que no podía dejar y me di cuenta que a mi lado había una nota que decía…
“Sólo si me amas, recuperarás lo que un día te di. Búscalo como solo tú sabes hacerlo, con los ojos del corazón”

Llevo ocho años sin verle, sin sentirle… No he vuelto a cruzármele por la calle. Todos los años vuelvo a nuestra cala a la misma hora y el mismo día y me quedo dormida esperándole aunque sé que él no vendrá.

Este año, no podré asistir a mi cita, me voy de crucero, no se… Algo me dice que hoy voy a volver a respirar.

Más playas donde JUAN CARLOS

6/8/11

BENDITA LOCURA


Bendita locura que apaga mi cordura cuando se vuelve insoportable.
Bendita locura que me ayuda dar portazos a todo aquello que me está asfixiando.
Bendita locura que me da fuerza para que pueda volar hacia dónde mis alas me quieren llevar.
Bendita locura que puede estremecer mi cuerpo con una sola mirada.
Bendita locura que se apodera de mi mente cuando la razón toma ventaja al corazón.
Bendita locura que despeja mis dudas con un brote de sinceridad.
Bendita locura que espanta los miedos que intentan apoderarse de mi libertad.
Bendita locura que me desmaya cuando tu sonrisa roza mis labios.
Bendita locura que llena mi piel de miles de estrellas fugaces cuando duermes a mi vera.
Bendita locura que me habla cuando estoy a solas junto a mí...
Bendita locura que desgarra mis entrañas cuando el Amor me deja tirada.
Bendita locura que me permite no morir.
Bendita locura que me hace Sentir.

4/5/11

ESTE JUEVES UN RELATO: LA COMIDA



La verdad que una no sabe muy bien a qué atenerse con las nuevas tendencias gastronómicas. Parece ser que el comer ha pasado de ser una necesidad básica de todo ser humano, a convertirse en una nueva ciencia o en la fabricación de nuevos productos que más bien parecen sacados de laboratorio.

Yo no puedo por menos que esbozar una sonrisa, cuando no una sonora carcajada, cuando una oye hablar de espuma de zanahoria, virutas de huevo ó, tiene cojones, deconstrucción de tortilla de patatas.

¿Pero qué es eso de deconstrucción?, si ahora va a resultar que yo soy una cocinera de última generación y de guante quirúrgico, pues nunca he conseguido hacer una tortilla de patatas con la estética tan estupenda que vemos en los bares o que hace mi madre, pues a mi, que aunque me queda muy rica, parece más un revuelto que otra cosa.

La cosa es que una anda despistada y ve en los cocineros mediáticos más pose, negocio, y marketing, que buena cocina. Y es que dar conferencias sobre la espuma de zanahoria mola mucho, y además te sacan en la tele. ¡¡¡Si es que yo me quiero comer un pinchito y no una escultura!!!

Estamos de acuerdo en que la cocina también es estética y evoluciona, pero creo que estamos perdiendo el norte, porque el sazonar un plato con pan de oro tiene bemoles. Por supuesto que cada uno es muy libre de comer dónde quiera y lo que quiera, pero yo no me quiero quedar con hambre. Que te sirvan un plato con tres porciones de no se sabe muy bien qué, con unos nombres que asustan, unos precios estratosféricos y que hayas tenido que hacer un año antes la reserva, pues puede ser de lo más fashion, pero yo prefiero el bocata de calamares de toda la vida.

Así que dejémonos de chorradas, usted que prefiere, ¿un par de huevos fritos con chorizo y un buen vino, ó nubes de limón nitrogenadas con esencia de almendra?

Un saludo, y buen provecho.


Más comilones en casa de Mª José

13/4/11

ESTE JUEVES UN RELATO. RELATO HISTÓRICO


Cada familia tiene su historia y esta es la historia de la mía.

Ummm veamos… ¿por dónde empiezo? ¡Ah si! Por el principio como es lógico. Bueno, es que en mi familia…. La lógica y lo lógico no existe. Y veréis como al final del relato me dais la razón. Empecemos por mi abuela materna que es de la que se todo o prácticamente todo, porque de mi abuela paterna no se apenas nada, bueno, si, que tenía tres tetas en vez de dos como todas las mujeres, pero eso no es relevante y es otra historia. Bien ¿Por dónde iba? ¡Ah sí! Ya me acuerdo. Mi abuela materna. En sus tiempos, alta, con el pelo castaño claro y los ojos grises. En fin, un bombón de la época. Pues bien, mi abuela, ha tenido dos maridos y dos amantes de los cuales, uno se convirtió más adelante en marido también. Total, ha enterrado a dos maridos y a un amante. Del primer amante tuvo una hija, a la cual reconoció como hija suya no su amante si no el padre del susodicho que era viudo; Ya que el amante en cuestión estaba casado y en época de Franco, tener un hijo con otra mujer estando casado, era motivo de cárcel. Total que la hija en cuestión pasó de ser hija de su padre a ser hija de su abuelo y sobrina de su padre. ¿Me seguís? Pues hay más.

Más tarde, conoció a su primer marido, y pese a que su madre (mi bisabuela) la dijo una y otra vez que ese hombre no era bueno y que le dejara, mi abuela, prefirió comprobarlo por ella misma y se casó con él dándose cuenta la misma noche de bodas que su madre tenía razón con respecto a su ya marido, cuando este la propinó su primera paliza. Seguían siendo tiempos de Franco y mi abuela la pobre, entre paliza y paliza, tuvo tres hijas más que con la anterior hacían cuatro. Sobra decir que la infancia de la hija mayor no fue muy buena que digamos, ya que su padrastro le propinaba tantas palizas a ella como a su madre.

Un día mi abuela le echó valor y decidió ir a denunciar a la guardia civil a su marido pese a que en aquella época, la guardia civil no solo no te ayudaba sino que si no volvías a casa, por las buenas, te llevaban ellos por las malas. Pues bien, cuando la guardia civil escuchó a mi abuela, por algún extraño motivo, decidió ayudarla y ellos mismos sacaron de la casa al marido de mi abuela. Sobra decir, que en esos años su marido se gastaba todo el dinero en borracheras y que mi abuela, trabajaba como una mula de carga para que sus hijas pudieran por lo menos tener un plato de comida en la mesa.

Después de aquello, mi abuela siguió trabajando y en uno de esos trabajos conoció a su segundo amante. Amante que años más tarde se convertiría en su segundo marido y en mi abuelo. Él estaba casado y tenía dos hijas. De hecho él y su mujer eran los jefes de mi abuela. Pero como la carne es débil, mi abuela estaba de muy buen ver y él era muy buen hombre pero todo lo que tenía de buen hombre lo tenía de mujeriego, pues le echó el ojo a mi abuela y se convirtió en su amante hasta que un fatídico día su mujer murió y entonces mi abuela pasó de tener un amante a tener una relación formal y años más tarde un marido. Y digo años más tarde porque él se había quedado viudo pero mi abuela aún estaba casada con el anterior y este tardó varios años en morirse. Total que mi abuela se vio de golpe con cuatro hijas propias y dos añadidas.

Poco a poco fueron pasando los años y mi madre se hizo mayor y ahí…. Mi madre tenía un novio con el que salía hacía varios años del que estaba hasta el moño y con el que seguía saliendo digamos que por inercia.

Mi abuela tenía una vecina cheposa que tenía tres hijos y una sobrina, la cual era la mejor amiga de mi madre. Un día mi madre subió a casa de la vecina a buscar a su amiga y vio en la cocina a un señor muy feo (esto lo dice mi madre no lo digo yo) sentado comiendo queso y bebiendo vino. Este señor resultó se el hermano pequeño de la vecina y tío de la amiga de mi madre y poco después mi padre. ¿Qué como llegó a convertirse en mi padre? Pues fácil. Mi madre se fue a pasar unos días a Madrid con su amiga y casualidades de la vida, ese señor vivía allí y una cosa llevó a la otra y mi madre volvió a casa anunciando a mi abuela y a su novio (antes amante) que se casaba. Pero que no se casaba con su novio de toda la vida, si no con el hermano de la vecina y tío de su amiga. Sobra decir que a mi abuela y a su novio (mi futuro abuelo) les dio un patatús con la noticia ya que mi madre sólo tenía diecisiete años y si se casaba iba a pasar de ser una chica sin responsabilidades a ser una esposa y madre de dos hijos.

Con todo y con eso, como mi madre otra cosa no, pero cabezota lo suyo, consiguió el permiso de mi abuela y se casó con el hermano de la vecina y tío de su amiga y fruto de ese matrimonio, nacieron tres hijos y uno de ellos es la que escribe. …Y ahí comenzó la historia de mi vida. Pero eso… eso es otra historia.


Nota del Autor: Cualquier parecido de esta historia con la realidad es pura coincidencia…. O no vaya usted a saber.


Más historias en casa de Gus

11/4/11

SED


Te acercas lentamente a mi lado, me tomas por la cintura y empiezas a besarme -No, no quiero, te digo que no Me besas como enloquecido.

–Déjame comerte a besos- me repites suavecito

-No, no quiero, te digo que no

Y cargándome en sus brazos me llevó desesperado, hasta que logró vencerme. Me arrancó la ropa a pedazos, me puso en la cama con sumo cuidado, y haciendo vibrar mi cuerpo, logró hacerme retorcer de placer, y me dijo:

-Te haré gemir una y otra vez, atándome a tus manos, subiéndome sobre ti

Y abriéndome las piernas su lengua introdujo dentro de mí.

-Te castigaré,-me dijo.- De deseos, de placer, y serás como un volcán lleno de pasión y fuego. Y retozó en mi cuerpo tenso de lujuria y sediento de amar.

Ya mi cuerpo le responde con mis suaves movimientos.

- Acaríciame -le digo-. Besa y muerde mi boca, quiero que tomes mis senos y acércalos a tu pecho, ven, sube a mi cuerpo, quiero sentirte bien dentro, sube y baja con placer. Arranca un grito de mis entrañas y déjame extenuada derramando sobre ti mis orgasmos ya pasmados. Ahora ven, y ahógame con tus besos. Déjame agonizar bajo la dicha, bajo la lluvia de tu semen y viviré en la orilla de tu boca, mojando con la punta de mis dedos el manantial que sale de tu sexo

6/4/11

ESTE JUEVES UN RELATO: A CUATRO MANOS. LA CARA


Observo tu cara purísima y resplandeciente y veo que de ella surge una luz silenciosa que todo lo desnuda, una luz que descubre paraísos y mares de ceniza. Es una cara que oculta sombras con su belleza y vuela como un pájaro en libertad. No puedo sacarte de mi cabeza, intentar olvidar tu rostro, es como ahogar el corazón y tratar de ignorarlo es como vivir a ciegas, dando tumbos. No sé quien eres pero siento la imperiosa necesidad de hablarte. Como acercarme a ti? Con que excusa? En mi imaginación armo toda clase de planes fantásticos pero al sentarme frente a ti en el tren cada día, los desecho. Tienes una mirada triste e intensa, la belleza de esa mirada azul me paraliza, solo me queda observarte furtivamente cuando creo que no me ves. Esta mañana al bajar has olvidado un sobre con papeles sobre tu asiento. He querido avisarte pero el tren ha sido más rápido que yo y ya estamos nuevamente en marcha. Con cuidado abro el sobre, son exámenes médicos según el membrete de los informes. No debería leer pero me gana la tentación: “Paciente: Juan Ignacio Lattari, 32 años. Diagnóstico: ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica). Presenta endurecimiento y/o pérdida progresiva de fibras nerviosas. Pronóstico: Atrofia/Parálisis muscular progresiva en un lapso de 6 meses a 2 años.” Al final del informe, escrito en lápiz, leo lo siguiente: “A la chica guapa del tren: tu rostro es el mejor comienzo para mis mañanas; si has llegado hasta aquí comprenderás porque no me he animado a hablarte hasta ahora. Luego he pensado que perdido por perdido ... ahí va: Le concederías unos minutos de charla y un café a un condenado? Espero tu respuesta mañana.”

INMA Y ANNY


Más caritas en casa de Gus

23/2/11

ESTE JUEVES UN RELATO: EL CONSTRUCTOR DEl MUNDO 2ª PARTE

Este relato lo ha escrito mi marido, el no tiene un blog donde plasmarmo asi que me ha pedido que lo publique en el mío.



El sonido de la máquina, ese beep incesante y monótono era el único sonido que rompía el silencio de la habitación. El ruido de la respiración asistida se había convertido en parte de ese pequeño rincón del mundo. Por eso, ya ni lo oía, era parte de un todo. Estaba cansado y delante de su cama, recordaba los días de compañía, rememoraba una y otra vez su mirada de manera obstinada, casi enfermiza. Me parecían lejanos, perdidos como algún capitulo en un libro de miles de páginas.
La seguía mirando y allí estaba, ajena al mundo, perdida en ese inmenso océano de olvido que se supone es estar en coma. Hacía unas horas que había vuelto a construir sus recuerdos, mis recuerdos… los nuestros. Pero la inmensa alegría que me producía ver su sonrisa se tornaba en dolor al saber que ese mundo era como un castillo de arena que desaparece cuando se lo traga el mar.
Durante mucho tiempo había seguido con ese juego, construyendo un mundo de papel. Me valía su sonrisa, el suave tacto de su piel, pero ¿de que me valía? Cuando el contador volvía a cero me estrellaba de nuevo contra un muro, contra las cuatro paredes de esta habitación.
Me levanté y volví a colocar la flor. Ésta se inclinaba burlona, como sabedora de la verdad que me esperaba.
Al sentarme de nuevo, me sentí cansado, con un cansancio infinito. No un cansancio físico si no mental. Como el condenado a muerte que sabe que su tiempo se ha acabado. Unas lágrimas brotaron de mis ojos y al caer hicieron un ruido seco y mordaz. La máquina cambió su beep discontinuo a un pitido constante y agudo, una línea continua y azul asomó en la pantalla. Se abrió la puerta y una mano
extraña se apoyó en mi hombro, su voz me lo dijo todo:Quizás sea mejor así”

ESTE JUEVES UN RELATO: EL CONSTRUCTOR DEl MUNDO


Te veo ahí dormida, sin más ruido en esta habitación que el sonido del monitor que me indica que aún quedan esperanzas. Y sueño que construyo un mundo para ti.
Es un mundo mágico, lleno de luz. Un mundo en el que no tiene cabida ni el dolor ni la desesperación. Está hecho de retazos de mi vida, de tu vida, de nuestra vida. Y te veo sonriente, paseando por las calles ajena a todo tu dolor y llena de vida. Vida que ahora está en mis manos….
Miro a mi alrededor y te vuelvo a ver dormida y me doy cuenta que sólo estaba soñando, que sigues ahí postrada y lo único que queda es esa margarita que me mira y se ríe porque ella sí está llena de vida.
Me acerco te acaricio el rostro y siento que no debo pedir perdón. Pero aún así, mientras acerco mi mano al monitor y lo desconecto, un susurro se escapa de mis labios….
“Lo siento mi amor, lo hago porque te amo”
Más constructores maravillosos en casa de Gus

17/2/11

TE DESEO


El deseo se apodera de mi cuerpo quemándome por dentro y siento como poco a poco hiervo y me estremezco al cerrar los ojos y soñar al con tus besos, con tus manos en mis pechos, con tu lengua lamiendo mi cuello y haciéndome perder el sentido del tiempo...
Te deseo y mis pezones que están erectos. Lo comprueban, te esperan, mis piernas tiemblan al sentir tu piel, al sentir como presionas tu cuerpo hacia mi...
Quiero tenerte, quiero llenarme de tu miel, quiero sentir tus manos apretando mis caderas, quiero sentirte penetrando mi inferior y es que te deseo, deseo subirme a ti, abrazarte junto a mi, mecerme y hacerte gemir...
Hoy quiero hacerte el amor, lamer y chupar tu parte más viril, hacerte venir y ver como este momento, como toda esta pasión te gusta y la disfrutas tanto como yo...
Te deseo, quiero hacerte el amor una y otra vez, me llenas, me prendes. Tócame, bésame, mírame, bébeme te estoy esperando...Sí, ya te estoy amando.

14/2/11

CON LAS MANOS EN LA MASA


A veces pasa, que mientras cocino, mis manos se mueven mecánicamente, removiendo el guiso, y la mente se me pierde en los laberintos de mi imaginación.
Y entonces pienso en ti, que llegas por detrás para abrazarme suave y besar mi nuca. Pasas una mano por mi cintura y con la otra me retiras el cabello, tan delicadamente que, antes de sentir tus labios, ya me estremecen las yemas de tus dedos.
Y comenzamos un suave baile contrapuesto, yo de espaldas a ti y tú frente a mi espalda, vaivén acompasado sin miradas cruzadas, pues yo vigilo la olla y tú, quién sabe si andarás espiando tras la curva de mi cuello.
Aún así, sin mirarme, me diriges con esa mano que abandonaste sobre mi ombligo, moviendo nuestras caderas a derecha e izquierda, y me besas, bajando del cuello al hombro y vuelta a subir.
Y siento que cambias el paso para rozarte contra mí, y esa mano abandonada, que dejó atrás mi vientre y ya pasea indiscreta sobre mi pecho, cobra vida, atrayéndome hacia ti, mientras tu cuerpo me empuja sobre la encimera.
Se diría que quieres atravesarme con tus envites, se diría incluso que quieres herirme, porque tus besos ahora muerden, tus manos pellizcan y la dulzura de tus palabras se ha tornado urgencia. Un “te deseo” resuena en mi cabeza y me estremece.
Entonces tomo aire, suspiro y, de pie, tal cual estoy, acaricio mi tobillo izquierdo con el empeine de mi pie derecho. Todo se difumina, la olla borbotea, y sonriendo, vuelvo a remover el guiso, en mi cocina.

10/2/11

ESTE JUEVES UN RELATO: MÁS BESOS


¿Que es un beso? ¿A que sabe? ¿Te puedes enamorar con un beso? ¿Como se da? ¿Cuando se da? ¿Por qué se da? Cuando un chico te besa… ¿te tienes que casar con él? ¿Y si besa mal? Porque yo no quiero estar para siempre jamás con un chico que bese mal.
Todas estas preguntas e incluso creo que alguna más me hacía yo cuando era chiquita. Mi primer beso creo que me lo dio un niño de mi barrio cuando yo tenía cuatro años. Bueno, más que un beso, fue un roce de labios, pero claro, como yo por entonces era una princesita, pues me creí que ese beso era la puerta al amor eterno. ¡¡¡DIOS LO QUE HACE VER PELIS DE WALT DISNEY!!! Perseguí tanto a ese pobre niño, que cuando me veía salía corriendo y gritando… ¡¡¡¡¡¡mamaaaaaaaaaaá!!!!!
Hay muchos tipos de besos y pasan como nosotros por etapas de nuestra vida. Está el comúnmente llamado muack, muack, que es el que usamos cuando nos encontramos con un conocido y le damos dos besos en la mejilla, pero sobre todo se usa cuando somos adolescentes y nos encontramos con nuestros amigos.
También está el beso de rigor, que es el que le damos a nuestra madre cada vez que la vemos, no es obligado, pero si cotidiano. La visita a nuestra madre, comienza siempre o casi siempre con un beso y un “hola mami”. Sobra decir, que cuando somos adolescentes, ese beso no existe.
Luego está el beso de agradecimiento. Este, es totalmente espontaneo, nos sale sin darnos cuenta, normalmente suele salir cuando te regalan algo que te hace mucha ilusión y estás tan entusiasmada que cuando te das cuenta, le has plantado un beso enorme a la persona que te ha hecho el regalo. Ese beso, si eres adolescente, de ser agradecido, pasa a ser eufórico y suele ir acompañado de un gritito tipo… ¡¡¡AAAHHH! Y un abrazo muy fuerte a tus amigas del alma que son las portadoras del presente.
Cuando tenemos cierta edad, empiezan a aparecer en nuestra vida besos interesantes. No quiero decir con esto que los anteriores no lo sean, pero les prestamos menor importancia.
Bien, os pongo en situación:
Sábado tarde- noche, tienes unos 17 años, estás en un pub con tus amigas bailando como una loca. De pronto se abre la puerta y aparece el chico que te gusta. Se te corta la respiración, empiezas a no llevar bien el ritmo de la música, total, estás hecha un flan. Ese chico te gusta mucho, y cuando digo mucho es mucho y se te cuela en tus sueños todas las noches, sueñas que te besa.
Te estás poniendo tan nerviosa que tienes que ir al baño, no sabes bien a qué, pero si que para ir tienes que pasar por su lado. Te acercas a tú mejor amiga y la preguntas ¿estoy bien? Y ella te dice… “Jo, tía estás que te sales” y con su visto bueno te encaminas al lavabo. Pasas por delante de él y te le quedas mirando, te saluda con la cabeza y tú solo aciertas a sonreírle. Entras el baño, te retocas el pelo y cuando vas a salir, justo en el pasillo te das con “tu chico” de morros que sin decirte ni media palabra, te coge de la mano, te lleva a la otra punta del pub,(tus amigas y sus amigos no pierden detalle) y te besa. Al principio, no sabes muy bien que hacer, pero cuando el separa sus labios de los tuyos, lo arrinconas y le das un beso que ni tu misma sabías que eras capaz de dar.
Ese beso, es en realidad TU PRIMER BESO y no es un beso de amor, pero si un beso de deseo, porque te morías por besarle y pensabas que nunca ibas a atreverte.
A ese beso, le siguen otros muchos, todos con adjetivos y nombres distintos. Besos largos y cortos, dulces y amargos, rápidos y lentos, buenos y malos. En fin, nos pasamos media vida buscando un beso. Pero no uno cualquiera, buscamos ese beso que está destinado a cada persona. Porque aunque parezca mentira, hay un beso destinado a cada persona y cuando lo encuentras, lo sabes al instante.
¿Cómo lo sabemos? Con ese beso, nos tiemblan las piernas, estamos nerviosos igual que un niño pequeño el día de reyes abriendo regalos y tenemos “mariposas” en el estómago. Puede que halla sido un beso corto o pequeño, pero si es el beso que nos hace sonreír a todas horas, seguro que ese beso era el que estaba destinado para nosotros y ¿por qué no? Puede incluso ser el que nos abra las puertas al amor verdadero.

9/2/11

ESTE JUEVES UN RELATO: BESOS


Te quiero contar algo...
Quiero que vengas y dejes que te explique de alguna manera lo que necesito para que lo puedas entender
Tengo la boca seca. Necesito un beso, tu beso. Si estuvieses aquí podría explicarte esto mucho mejor. Y sin duda lo entenderías mucho mejor.
Si me besaras de nuevo podría perderme en ese refugio dulce donde uno se dedica a vivir sensaciones sin ocuparse de lo que sucede fuera de las bocas en las que se hace el amor.
Sellar mis sueños en tu boca, un beso de humo que contamine de deseo la distancia, esa que no suma ni resta kilómetros.
Ciegos los ojos, sordos los oídos, inertes las piernas, dormidas las manos, borrado todo el cuerpo...
Quiero volver a ahogarme en tu boca, hasta sentir un placer tan agudo que duela
Ya sé que tienes razón, que sólo nos entendemos cuando nuestros cuerpos hablan
Por eso te pido que vengas y te acerques para que puedas contárselo otra vez a mi piel.

Más besos en casa de Gus

6/2/11

TU SILENCIO (han pasado casi 6 meses desde que te fuiste)


Estoy cansada de esperar algo que no llegará
Cansada de buscar y no encontrar.de sufrir y llorar
Cansada de tanto tropezar.

Quizá el problema es querer a quien no podrá corresponder
Querer escuchar lo que tu boca jamás pronunciará

Me falta el aire y no es enfermedad. Es sólo tu ausencia la que no me deja respirar, la que me llena de ansiedad aquella que no puedo olvidar…
Tu silencio me tiene sorda
Mis oídos solo quieren escuchar lo que él no puede ni quiere pronunciar
Solo escuchan frases que reflejan lo que sucede en realidad
Me falta el aire y sólo hay una razón
Tú te lo llevaste en silencio y sin decir adiós
Devuélvemelo por favor
Para que siga latiendo mi corazón…

3/2/11

ESTE JUEVES UN RELATO: SENTENCIAS


Esa mañana al despertar no se sintió nada bien. Se sentó en la cama. Sentía náuseas y el impulso de llorar se adueñaba de ella; pero no quería darle el gusto a su cuerpo, no en aquel momento. Pronto recordó que aquella noche había tenido un sueño y al tragar un sabor amargo le erizó la piel. Y pronto entendió de qué se trataba; podía ignorar al mundo entero, podía desaparecer si así lo quisiera, pero jamás podría olvidar. Una vez más, el fantasma se sentaba a su lado. Y en su pequeña cabeza lo de siempre, preguntas que no vacilaba pero que apantallaban su mente sin permiso ni pudor. Cómo deshacerse de un problema que no tiene solución…cómo caminar todos los días con una mochila que no te pertenece…cómo soportar la carcajada de un sujeto que vive como si nada cuando tus ojos por la noche no encuentran explicación…cómo se mantiene una mentira de la que no somos progenitores porque no existe alternativa alguna… porque la verdad astillaría un presente, un futuro…como se sonríe todas las mañanas si en el vientre un peso amargo nos amenaza con explotar, con hablar, con decirlo todo… cómo se sigue después…Los minutos corren, los días y las estaciones se disipan como el sonido, y el pasado lejos de disolverse se vuelve aún más presente, más cercano, más injusto. Y no hay salida, las puertas están abiertas para escapar, pero el alma tira en contra y la razón no tienen lugar en esta emboscada. Hay que caminar, hay que levantarse de esa cama y seguir caminando.
¿Y si acaso el silencio es la única verdad? O¿ es por cierto considerada una actitud más ética y valiente la de desatar una realidad siendo conscientes de la tormenta que se encima sobre aquellos que más amamos? Todos callan y miran a un costado, los mortales prefieren dedicarse al juicio, porque claro está que, decir la verdad es lo que se “debe” hacer.
El Presente y el Pasado juegan hoy a la rayuela, ella se niega a jugar pero ellos insisten, y la arrastran sosteniéndola de los brazos. Siente impotencia pero no hay salida, no hay sueño que soñar ni puerta por la cual escapar, debe jugar. Y debe ganar. Se apura a llegar al cielo, porque sabe que al menos ganará así una partida. Sin levantar la mirada sus ojos miden y especulan cada salto, cada movimiento… Llega al 10, está preparada para dar su último salto, ese que la llevará al cielo. Pero una sombra le nubla el camino y al alzar la vista el Presente la toma de los hombros y con una sonrisa diabólica y gozosa la empuja hacia atrás. Empieza a caer y recuerda que aquella caída tuvo el sabor inconfundible de la eternidad. Un ruido espeso y penetrante la envuelve y la aturde. Hace intentos de subir, pero es imposible y el Pasado tampoco la ayuda, espera que lo haga sola. No recuerda más nada, y menos aún como terminó ese malicioso juego en el que la creían títere de sus deseos. Algunas noches se pregunta si no estará aún sumergida en esa caída y hacer intentos por levantarse son acaso de lo que se trata su vida.
Más sentencias en casa de Gus

30/1/11

ESTA NOCHE


Esta noche, yo te hare el amor a ti. Esta noche yo te seduciré, hoy seré yo quien te haga perder la cabeza...quien te haga suplicar por la gloria...por el éxtasis.
Esta noche...seré yo quien te desvista suave...Lentamente, mientras beso cada centímetro de tu piel.
Esta noche...Seré yo quien admire tu hermoso cuerpo, seré yo quien te vea a la luz de la luna.
Esta noche, no seré tuya...tu serás mío...
Esta noche...Hare palpitar tu corazón con frenesí...
Esta noche...Te besaré...Te amare... te poseeré...con pasión y con ternura a la vez.
Esta noche...seré yo quien te demuestre cuanto te amo...con besos y caricias totales....completas...Sin tabúes.
Esta noche...es mi noche.